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Manos sujetando una bola del mundo

Protege la biodiversidad con tu móvil

Diego Ferraz Castiñeiras

Ambientólogo, técnico de la Fundación Renovables y divulgador

La biodiversidad es fundamental para el equilibrio de los ecosistemas y el bienestar de todas las especies, incluida la especie humana. Sin embargo, la acelerada pérdida de biodiversidad debido a la actividad humana, como la deforestación, la contaminación y el cambio climático, está afectando gravemente a los ecosistemas. 

 

Según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, alrededor de 5.200 especies están en peligro de extinción. Esto incluye el 25% de los mamíferos y anfibios, el 34% de los peces, el 20% de los reptiles y el 11% de las aves. Esta pérdida tiene repercusiones no solo para la naturaleza, sino también para la economía, la salud pública y la seguridad alimentaria, ya que la biodiversidad nos proporciona servicios ecosistémicos clave, como alimentos, agua limpia, aire puro y regulación del clima.

 

Tanto en Europa como España se está intentando llegar a la meta de alcanzar el 30% de superficie marina y terrestre protegida para 2030. La buena noticia es que, la tecnología ofrece soluciones innovadoras para frenar esta pérdida de biodiversidad. Puedes participar activamente en su protección utilizando simplemente tu smartphone: desde participar en proyectos de ciencia ciudadana hasta aprender sobre la fauna y flora local, tu móvil puede ser una poderosa herramienta para contribuir a la conservación del planeta.

Ciencia ciudadana: proyectos colaborativos para proteger la biodiversidad

 

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La ciencia ciudadana permite a cualquier persona, sin importar su nivel de conocimiento, contribuir con datos valiosos para la investigación y conservación de especies. Estas plataformas aprovechan el poder de la comunidad para generar información crucial sobre la biodiversidad.

  • iNaturalist: Permite registrar observaciones de fauna y flora, contribuyendo a una base de datos global utilizada por científicos. Además, puedes identificar especies gracias a la ayuda de otros usuarios.

  • eBird: Ideal para ornitólogos amateurs, te permite registrar avistamientos de aves y contribuir al monitoreo global de sus poblaciones.

  • PlantNet: Identifica plantas a partir de fotos, ayudando a descubrir especies locales y contribuyendo con datos a investigaciones científicas.

 

Además de registrar especies, tu móvil puede ayudarte a aprender más sobre la fauna y flora local y global, y a involucrarte en acciones concretas para su conservación.

 

  • WWF Together: Proporciona información sobre especies en peligro, actividades interactivas y permite apoyar proyectos concretos de conservación.

  • Map of Life: Descubre qué especies habitan en tu zona y cómo puedes ayudar a protegerlas, con mapas interactivos sobre la distribución global de las especies.

 

En adición de las aplicaciones y herramientas que hemos comentado, hay otras formas de contribuir a la conservación de la biodiversidad:

 

  • Participando en retos globales: Apps como iNaturalist y eBird organizan eventos como el City Nature Challenge, donde las ciudades compiten por registrar el mayor número de especies.

  • Uniéndose a comunidades de conservación: Conéctate con grupos locales o globales que usan estas apps para compartir experiencias y aprender más sobre cómo proteger el medio ambiente.

  • Apoyando proyectos de conservación: Desde tu móvil, puedes donar a iniciativas de reforestación o protección de hábitats críticos para la biodiversidad.

 

Por pequeña que sea, cada acción contribuye a un esfuerzo colectivo para preservar la biodiversidad. Además, en este caso estas acciones no solo tendrán un impacto positivo en la biodiversidad local, si no que tiene beneficios para ti como la propia conexión con la naturaleza, ya que estas aplicaciones te incitan a explorar tu entorno y valorar el patrimonio natural que nos rodea o la educación y conocimiento adquirido.

 

Un ecosistema saludable y biodiverso es fundamental para los recursos naturales, la economía y la salud pública. Regula procesos ecológicos, apoya sectores clave como la agricultura y medicina, y ayuda a prevenir enfermedades. En este aspecto, la tecnología puede ponerse al servicio de la conservación y contribuir a marcar la diferencia en la protección de la biodiversidad.